Nuestra Fiesta Patronal

El 5 de agosto se celebra la fiesta de Nuestra señora de las nieves, cuya devoción se remota a los años 352 y 366, en tiempos del papa Liberio. Un patricio llamado Juan y su mujer quienes no pudieron tener hijos en su matrimonio, pensando en el mejor modo de destinar la herencia que dejarían al morir, pidieron a la virgen María que los iluminara. La madre de Dios respondió a sus oraciones y en sus sueños les dijo que deseaba la construcción de un templo en su honor en el lugar que ella indicaría. En la mañana del 5 de agosto, un día muy caluroso del verano romano, la cima del monte esquilino apareció cubierta de nieve. Los esposos fueron enseguida a contar su versión al papa y resulto que este había tenido el mismo sueño. El sumo pontífice organizo una procesión hasta el lugar que la virgen había señalado y todos quedaron maravillados al ver el terreno cubierto por la nieve fresca y blanca. El papa hizo preparar los planos y el patricio Juan con su esposa financiaron la obra. Lamentablemente, de esa antigua construcción no quedaron casi restos. Ochenta años más tarde el papa Sixto III que reino entre los años 432 y 440, reconstruyó el templo que hoy es la basílica de santa María la mayor, la iglesia más antigua del occidente dedicada a la virgen María. ​
La devoción a la virgen en la ciudad de Pamplona se inicia en la época de la colonia en el templo de santo domingo, que fue construida en la plaza mayor el 17 de septiembre de 1561 con el nombre de las nieves.​
El 15 de septiembre de 1835, Pamplona fue erigida como Diócesis. El templo parroquial fue convertido en catedral pero fue destruido totalmente por el terremoto de 1875. Entonces se trasladó la catedral al extinguido   monasterio de santa clara, y el templo parroquial se trasladó al extinguido convento de San Antonio de Padua de los padres Dominicos. Y desde esta fecha allí funciona la parroquia de las nieves.